Los filtros de canasta son dispositivos versátiles diseñados para filtrar una amplia gama de fluidos, capturando partículas sólidas de diversos tamaños. Las canastas, que son fáciles de extraer y limpiar, se adaptan a diferentes necesidades de filtración. Dependiendo de los requisitos de la aplicación, estos filtros pueden configurarse con una o varias canastas, o incluso con elementos plegados para aumentar la superficie de filtración.

Construidos con una carcasa robusta, los filtros de canasta incluyen un elemento filtrante reforzado por una estructura perforada, un sistema de sellado hermético para prevenir fugas y diversas opciones de conexión para integrarse en distintos sistemas de tuberías.

Según definiciones técnicas, un filtro de canasta es:

Un contenedor sellado equipado con un elemento de malla lavable, diseñado para capturar y retener partículas extrañas de hasta 0,001 pulgadas de diámetro presentes en fluidos en movimiento.